Consumo de medios en la era PostCOVIDta: nada va a cambiar, todo ya ha cambiado
Estamos viviendo un momento histórico, de los que servirán como punto de referencia para estudiar la evolución humana cuando miremos hacia atrás. Pero si lo analizamos desde el punto de vista del consumo de medios no creo, sinceramente, que sea un giro dramático que vaya a propiciar un final diferente del esperado. Lo que comenzó con la era digital no lo va a parar ni a cambiar la crisis del Covid-19, si no que ha sido en muchos casos como echar gasolina al fuego.
Lo que si vamos a vivir son cambios a corto/medio plazo en la tendencia debido a la situación de recesión económica que vamos a sufrir los próximos meses, y que afectará al consumo de los medios. Para algunos dará una pequeña tregua (como puede ser a la TV) pero para otros acelerará la necesidad de una transformación de negocio urgente para evitar la desaparición. Intentemos, desde la máxima humildad del que asume que todo puede cambiar en cualquier momento, prever qué va a pasar con los distintos medios a corto y medio plazo.
¿Qué va a pasar con los medios a partir de ahora?
El Coronavirus ha hecho en un mes más por la expansión del entorno Digital que todos los esfuerzos de las empresas tecnológicas en los últimos años.
Ahora mismo, aislados en nuestras casas, Internet es el pegamento que mantiene unido el tejido social. Hemos descubierto nuevas formas de comunicarnos y de relacionarnos, nuevos entornos de ocio, nuevas maneras de comprar, nuevas formas de evolución personal… y lo más importante, las hemos incorporado en nuestro ecosistema sociopersonal propio de una manera tan profunda e intensa que la huella será permanente.
El auge en el consumo de las redes sociales y de la prensa digital (el 63,6 % destaca que su principal fuente de información durante las crisis es la prensa digital y el 59,9 %, las RRSS) los ha catapultado todavía más. Otro caso es la explosión de suscripciones a servicios OTT, tanto Plataformas de contenido Audiovisual (Netflix ha vuelto a batir su propio record), como de eSports eta Videojuegos, y un largo etcétera.
Y sin olvidarnos de uno de los efectos más positivos (para nosotros y para el planeta) de esta situación, la prueba definitiva de que el teletrabajo es posible, y la explosión de herramientas como Zoom o Teams, o plataformas online de gestión de proyectos o equipos. El teletrabajo ha venido para quedarse y puede tener un impacto directo no solo en nuestros estilos de vida y nuestra relación con el mundo, sino también en cómo consumimos los medios, tanto online como offline.
Y lo que es más importante, por primera vez y en mayor o menor medida, esta expansión ha tenido lugar en todos los segmentos de la población a la vez. Abuelos haciendo videollamadas por WhatsApp con sus nietos, jóvenes explotando aún más sus capacidades sociales en TikTok o en Twitch, niños asistiendo a clases virtuales y haciendo deberes online con sus padres, etc.
Nada de esto hubiera pasado sin el confinamiento (algo bueno hemos sacado de todo esto) y dejará un poso sobre el que seguirá creciendo el consumo digital.
La Televisión lineal es otro de los medios que ha tenido un impacto positivo en cuanto a audiencias se refiere. El confinamiento, la incertidumbre y la sobreinformación de dudosa veracidad, han hecho que la gente vuelva a rodear al televisor en busca de información y entretenimiento, recordando un pasado glorioso. Como el que se ha puesto a hacer pan y bollería buscando la reconfortante recompensa de lo sencillo, la tranquilidad de lo conocido. Sin embargo, el destino del medio tal y como lo conocemos ahora ya está escrito y no va a cambiar si las cadenas no cambian. Eso sí, la tregua que les dará la crisis económica, que ralentizará (que no evitará) la vuelta a las audiencias pre-COVID, deberían aprovecharla para reenfocar sus modelos de negocio y estrategias de contenidos. Deberán sacar provecho de lo aprendido: el contenido en directo, tanto informativos como programas de producción propia son su salvavidas. Por lo menos hasta que las OTTs decidan incluirlo en su oferta. ¿Llegaremos a ver un “Netflix News” o “HBO Supervivientes”?
La Radio parece que también ha podido verse favorecida en cuanto a penetración del medio, aunque en menor medida. La verdad es que, como medio, se está convirtiendo en una auténtica superviviente, impasible y robusta ante cualquier circunstancia. Ha encontrado su hueco y por el momento seguirá dando guerra. Además, puede adaptarse fácilmente a los posibles cambios traídos por la digitalización. Eso sí, lo tendrán más fácil las generalistas y deportivas que las musicales, que tendrán que hacer un mayor esfuerzo por reinventarse.
Y ahora vamos con los que lo han pasado peor durante esta crisis. Unos resurgirán cual Ave Fenix, como el medio Exterior. En cuanto la población vuelva a llenar de vida las calles, ellos volverán a brillar y seguirán con la adaptación a la nueva situación, en gran parte gracias a la digitalización y la implantación por fin de la programática en sus modelos de contratación.
El medio Cine, que estaba recuperando su sitio gracias a la adaptación tecnológica y de sus modelos comerciales, es el que más ha sufrido con la crisis sanitaría (salas cerradas) y el que más puede sufrir la crisis económica (¿salas vacías?). Sin embargo, confío en su poder de reinvención para aprovechar lo que no puede ofrecernos las OTTs, una experiencia sensorial completa al usuario.
Por último, el medio que lo tiene más difícil y para el que el Covid-19 ha podido ser la puntilla: los Medios gráficos. Por supuesto que todo aquel que tenga versiones online podrá seguir vivo a través de su avatar digital, pero el papel como tal puede pasarlo muy mal. Si ya lo adelantaba los datos de OJD 2019 con una caída en la difusión de la Prensa de un -9,6%, todo esto que ha pasado y el comportamiento del lector a medio plazo (no me veo volviendo a compartir un periódico en un bar o en la peluquería) puede suponer un bache demasiado grande. Lo que es seguro es que la vuelta a la “normalidad” nos traerá fusiones y adquisiciones entre los supervivientes y empujará aún más a los soportes a intentar sacar el máximo partido a los entornos digitales para sobrevivir, como el aprovechamiento de la Data o las fórmulas de suscripción (con ayudas como la bajada del IVA al 4%).
Lo dicho, que cuando todo esto quede como un mal sueño y volvamos a la “normalidad” (esperemos que hayamos aprendido algo y esa “normalidad” sea un poco más normal que antes), todo seguirá el plan que ya estaba trazado. Pero agárrense fuerte, porque todo irá un poco más rápido, si cabe.
#SEGUIMOSAVANTE
PD: Mi apoyo y mi ánimo a todos los compañeros de los medios que lo puedan estar pasando mal con esta crisis. Seguiremos trabajando codo con codo para salir adelante, como hemos hecho siempre.
Álvaro Brandau, director de Desarrollo Estratégico en Avante Medios.