ANUNCIANTE Y AGENCIA DE MEDIOS, EL MARIDAJE PERFECTO 

Beatriz Herrera, nuestra directora de AVANTE Levante, reflexiona en este artículo para Dircomfidencial sobre cómo planificar la estrategia de medios que mejor maride con la marca

A menudo me encuentro reflexionando sobre la vasta y rica paleta de posibilidades que nos ofrece el mundo publicitario. En este sentido, no puedo evitar hacer una analogía con el fascinante universo del vino. Al igual que en la enología, donde cada varietal, cada añada y cada región aportan matices únicos, en la publicidad cada canal, cada estrategia y cada mensaje tiene su propio carácter y potencial. 

Imaginemos por un momento que el mundo de los medios es una bodega. En ella, encontramos una variedad de «vinos publicitarios»: desde los robustos tintos de la televisión, que ofrecen una experiencia rica y envolvente, hasta los frescos y vibrantes blancos de las redes sociales, que capturan la atención de manera rápida y efectiva. Cada uno de estos «vinos» tiene su lugar y su momento, y la clave está en saber cuándo y cómo servirlos. 

La televisión, con su capacidad de contar historias y crear conexiones emocionales, es como un buen Cabernet Sauvignon: profundo, con cuerpo y capaz de dejar una impresión duradera. Por otro lado, las plataformas digitales son como un Sauvignon Blanc: frescas, ágiles y perfectas para captar la atención en un instante. Y no olvidemos el espumoso mundo de los formatos enriquecidos, que, como un buen Champagne, pueden elevar cualquier ocasión y hacer que un mensaje resuene de manera festiva y memorable. 

Sin embargo, al igual que en la cata de vinos, donde la combinación de sabores y aromas puede llevar a descubrimientos sorprendentes, las agencias de medios también debemos ser creativos y audaces. El maridaje idóneo de diferentes canales y formatos pueden dar como resultado campañas innovadoras que cautiven a nuestro público de maneras inesperadas. La clave está en conocer a nuestro «catador», es decir, a nuestra audiencia, y entender sus preferencias y comportamientos. 

Además, así como un buen vino requiere tiempo para madurar y desarrollarse, nuestras estrategias publicitarias también necesitan ser cultivadas. La planificación cuidadosa, la investigación y la adaptación constante son esenciales para garantizar que nuestras campañas no solo sean efectivas, sino que también evolucionen con la marca. 

En este vasto mundo de posibilidades publicitarias, es fundamental recordar que no hay un enfoque único. Lo ideal es encontrar la estrategia que mejor maride con la marca y en AVANTE somos expertos en ello. 

¡Un brindis por la publicidad y por este 2025 que está a punto de comenzar!

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